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Imagine que una foto del universo fue tomada al momento exacto de su nacimiento. Ahora piense que esa foto, se convierte en el mapa de su vida que, al igual que un mapa de viaje, tiene la posibilidad de mostrarle sus puntos de partida y de llegada, sus caminos, los peligros que estos esconden, los paraísos que le esperan, las rutas despejadas, los terrenos difíciles, entre otras señales. Ahora contemple cuánto podría mejorar su viaje, si usted tuviera acceso a ese mapa.
La astrología, es tan solo una de las muchas vías a las cuales podemos acceder para hacer de este viaje, algo más acertado, feliz y provechoso. Como esta, existen otras formas que pueden ayudarle a conocer sus caminos y a elegirlos, ya no al azar, sino conociendo las ventajas, desventajas y consecuencias de ellos. Estas ciencias, prácticas o métodos colaboran entre sí ayudándole a leer los signos del camino. Invariablemente, todas ellas parten de una base común: cada persona es un individuo, con caminos, posibilidades, razones, dones y poderes específicos.
El universo ha conspirado para crear su vida y la carta astral es la representación de esa conspiración. En ella, usted identificará sus caminos posibles, fortalezas, debilidades, tendrá una panorámica de su existencia. A través de esta herramienta, lo que usted puede considerar una circunstancia negativa, podrá convertirse en una expresión positiva al comprenderla, aceptarla y trabajarla. Una vez que se identifica el problema, este empieza a desaparecer. No se trata de magia, se trata de consciencia y conocimiento de nuestro ser.
Lo invitamos pues, a conocer su mapa, a tener consciencia de sus caminos, a entender lo que el universo le pide, a comprender su misión. Lo invitamos a saber qué senderos de su vida recorre, a permitir que esta fluya de la manera adecuada y hacia el punto acertado. Le invitamos a conocer su libreto, las cartas de su baraja, a viajar bien acompañado, a encender las luces de su vida, a encontrar su centro.
La diferencia entre una vida plena y una vida insatisfecha, se resume en una cuestión de ubicación. Desde cada área de su vida, usted tiene caminos complejos y tormentosos por los cuales transitar o tiene caminos donde las mejores sorpresas son las que le aguardan.
Es cierto que, en algún momento de la vida, cada uno de nosotros habrá de transitar todos los caminos trazados en la carta astral, ya que todos implican aprendizajes, lecciones y recompensas que no pueden quedarse pendientes. Sin embargo, también es cierto que quedarse recorriendo un solo camino durante mucho tiempo terminará siendo un desgaste de energía, pues cada uno de ellos tiene su ciclo. Hay momentos para aprender y momentos para recibir nuestras recompensas.
Como un buen mapa, la carta astral nos indica qué caminos estamos transitando. Con la lectura de la carta podremos advertir dónde estamos detenidos, o hacia dónde estamos avanzando. Muchas veces avanzamos entusiasmados a la boca del lobo sin saberlo y ser conscientes de ello.
Tras la lectura de su carta, usted estará en la posibilidad de mirar el mapa de su vida y decir “Sí, Yo estoy aquí” y después decidir “Quiero caminar hacia allá”. Usted tendrá una amplia panorámica de su existencia y sus posibilidades y lo mejor, tendrá los ojos, la mente y la consciencia muy abiertos para transitar por ella.
En este sentido, lo más valioso de una buena interpretación de su carta astral no es la predicción, no es responder a la pregunta “¿Qué pasará?” es responder a la pregunta “¿Dónde estoy ahora?”, porque es a partir de esta, que empieza su futuro.
